De metas, aspiraciones y anhelos

"Muy lejos, allí cerca del sol, están mis más altas aspiraciones. Tal vez no sea capaz de alcanzarlas, pero puedo admirar su belleza, creer en ellas y tratar de llegar adonde me guían."

Louisa May Alcott.

Siempre me he considerado una soñadora empedernida, he llegado a afirmar cientos de veces que el día que deje de soñar simplemente moriré, quizás no de la forma clínica que todos conocemos, pero si de mi alma, que sin duda se marchitaría hasta quedarse en nada.

Sin embargo, esto no quiere decir que pase mi vida entre nubes rosas de algodón y pierda constantemente los pies del suelo, ya que no es así, no niego que a veces me sucede y las caídas duelen, pero a la vez son éstas las que me hacen reaccionar, darme cuenta y tratar de mejorar.

Sé perfectamente que en ocasiones las cosas no resultan fáciles, pero no veo barreras que impidan cumplir mis anhelos, sólo obstáculos a vencer, pruebas que superar para conseguir aquello que tanto deseo.

Mi vida se compone en gran parte de sueños que se transforman en metas, mismas que siempre me acompañan y me guían para escalar un peldaño más en mis aspiraciones.

Creo que puedo alcanzarlas porque vivo para ello, pero si llegara a quedarme en el camino estaré feliz de haberlas contemplado y hecho todo lo posible para llegar hasta ellas.